Mismamente yo: Mi cerebro ya está en modo MARGARITAS.

     ¡Atención, atentas lectoras, soñadoras y compañeras de teclas! Sé que lo prometido es deuda y que tengo dos posts y un relato que preparar. Pero, OMG! tengo que confesar que mi cerebro ya no puede disimular:

¡ESTOY A TRES DÍAS DE MIS ANSIADAS VACACIONES!

    Sí, sí, lo habéis leído bien. ¡¡¡TRES DÍAS!!! Y mi cabeza, que normalmente está ideando tramas complejas, construyendo mundos fantásticos y debatiéndose entre una coma o un punto y coma, ahora mismo solo visualiza...

¡DEJAR LAS GAFAS DE TEACHER EN CLASE HASTA SEPTIEMBRE!

     Mi brújula interna, esa que me guía por las sendas de la narrativa, se ha vuelto loca. Ahora mismo solo apunta hacia el sur, hacia el sol, hacia ese lugar idílico donde la única "organización" que me interesa es decidir si la siguiente margarita es de fresa o limón. ¿Acaso pensaban que hablaba de flores? Noooo, ja, ja, ja...

    Juro que he intentado concentrarme para escribir los posts de la semana, ojo lo he hecho, a pesar que ahora mismo en mi calle suena la música, estamos en fiestas y tengo un concierto casi junto a la ventana. Sí, sí, la gente saltando copa en mano al ritmo de la música mientras yo me empeño en darle a la tecla. Ahora no sé cómo de coherente me ha salido el post y el relato, igual, más de una el miércoles quiere matarme, ja, ja, ja. Yo solo he dejado a mi mente divagar e imaginar la luna de una noche de verano reflejada en el mar, mientras una suave llovizna refresca el ambiente y la liberosis de no tener que pensar en nada más que en la brisa, mientras El ritmo del garaje es coreado en la calle, cuesta no seguir los cánticos. 

     Así que, aunque tengo el borrador del próximo post más o menos cocinado, creedme cuando os digo que mi capacidad de atención es ahora mismo la de un pez tropical ante un nuevo arrecife. Estoy en la recta final de esta travesía laboral y mi espíritu ya ha desembarcado en la isla de la desconexión. Mmm...Me traicionan mis ganas de perderme en la isla de GARA, ja, ja, ja.

      Prometo no desaparecer en vacaciones, pero también necesito recargar las pilas para el próximo curso, sumergirme en la escritura, la lectura, el relax, las margaritas, eso sí, espero que estos tres días sean breves y nada intensos, lo dudo, el jueves mis alumnos se enfrentan al B2 y, como Elva que me llamo que esta semana me van a odiar, ja, ja, ja. No, lo dudo, el amor es mutuo y, por cierto, es el grupo con el que me aposté la melena. ¿Terminaré a lo Sinéad O'Connor?

Muaaaaaackis...muaaaaaaackis

Elva

PD: ¿Algún consejo para sobrevivir los últimos días pre-vacacionales sin que el cerebro se convierta en gelatina? ¡CUENTAME EN COMENTARIOS!