Mismamente yo: En vacaciones los lunes son menos lunes.

     El lunes se quita el disfraz de némesis del fin de semana cuando nos encontramos de vacaciones, atrás quedan las prisas, el despertador... Bueno, esto es mentira, al menos en mi caso, yo siento la necesidad de ponerlo, por si un casual me quedo dormida.

¿Qué ocurriría si me quedara dormida?

Nada, sin contar mi absurdo sentido de la culpabilidad por no haberme despertado antes, ja, ja, ja.

   Luego, igual dentro de un mes me estoy arrepintiendo por no haber dormido más, pero yo necesito esa sensación de tener tiempo, de disfrutar de las horas, bien sea leyendo, escribiendo o no haciendo absolutamente nada.

   Escribir, ese es mi plan para estas vacaciones, como sabrás, ahora mismo me encuentro sumergida por completo en la historia que pensaba publicar las pasadas navidades y para la que no encontré tiempo. Sí, sí, muchas son las veces que leo por redes que no es falta de tiempo, sino falta de organización y, ya te digo yo que en mi caso no es desorganización, sino de horas en el reloj. Sí, claro está que siempre se pueden sacar 15 minutos, pero de 15 en 15 minutos no escribes una novela, bueno, a no ser que tu plan sea publicarla en 15 años.

   Escribir requiere tiempo y, ojo, yo soy la primera que aprovecha cualquier momentito para escribir, cuando iba a trabajar en metro escribí muchas escenas en el camino de ida y vuelta del trabajo a casa y viceversa, pero ahora voy caminando y, oye, igual debería grabarme, pero no me gusta nada. No sirvo para describir escenas o mantener conversaciones de esa manera, necesito sentarme bien sea a las teclas o lápiz en mano, eso me da igual, como también me da igual el lugar. No necesito un sitio fijo, tengo una buena capacidad de concentración, pueden estar bailando a mi alrededor que yo me meto en mi mundo y desconecto de todo lo que sucede fuera del mundo de los personajes.

     Así que mi principal plan de estas vacaciones es la escritura, pero no pienso ofuscarme si de pronto la procrastinación llama a la puerta, porque estoy de vacaciones, ja, ja, ja y, tampoco es plan de no desconectar y llegar a septiembre como si no hubiese habido agosto. Ahora, sea como sea, Gara saldrá a la luz para navidad.

   Si intentar acabar la novela es mi misión principal, la otra misión, la cual considero más difícil es reactivar esa tribu de lectoras que una vez hubo a mi alrededor y, así volver a estar presente en redes; si ustedes se mueven, yo me moveré más y, sacaré esos minutos que no tengo para seguir estando aquí. Cierto que sé que voy contracorriente, porque ahora anda todo el mundo de veraneo, pero ¿alguien habrá por ahí leyendo, no? ¿Desde dónde me lees tú? ¿Qué te gustaría que escribiera?

Muaaaaackis...muaaaaaackis

Elva